Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela

Discurso ante la  Plenaria de la 105 Conferencia Internacional del Trabajo

Viceministro José Ramón Rivero

Gracias Presidente,

En nombre del Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela saludamos al Director General y agradecemos la presentación de su memoria sobre La Iniciativa para poner Fin a la Pobreza.

Coincidimos en que la Agenda 2030 es ambiciosa y compleja en lo relativo a la erradicación de la pobreza y la desigualdad. Ello implica que desde la OIT se realice un debate más profundo que tome en cuenta estas dificultades, para poder asumir verdaderamente el desafío desde los obstáculos estructurales y no desde el marco de la generalidad.

Mientras se habla de una Agenda para erradicar la pobreza en el mundo, vemos con asombro como se generan guerras para someter a países que poseen riquezas energéticas y otras materias primas estratégicas, lo cual genera desplazados que en su desesperación toman rutas que los expone a morir en el mar o de frío o de hambre.

Hoy vemos en el mundo como se levantan muros de intolerancia y de xenofobia frente a migrantes, vemos como se despiden a millones de trabajadores, como se reduce la seguridad social en muchos países, como se disminuyen los derechos laborales y se precarizan y flexibilizan las condiciones de trabajo.

Asimismo, vemos como las medidas económicas impuestas para el pago de deudas externas, se concentran en la disminución de salarios, pensiones y otras atenciones de carácter socio-laboral. La aplicación de las medidas por parte de los organismos multilaterales en materia económica, sólo generan más pobreza y más desigualdad.

Mientras todas estas prácticas se sigan aplicando, no se llegará a erradicar la pobreza ni la desigualdad en el mundo.

Muy por el contrario ante esta situación, mi Gobierno desde sus inicios en 1999, ha implementado medidas estructurales de profundo contenido social y humanista, que sí han permitido reducir la pobreza, disminuir las desigualdades sociales y proteger a los trabajadores y al pueblo venezolano.

En 1998 había 54,5% de personas pobres, de los cuales 23,4% eran pobres extremos. Nuestro Gobierno revolucionario ha logrado disminuir la pobreza extrema al 8%. Así mismo  el coeficiente Gini que mide la desigualdad, ha disminuido a 0,380, hasta llegar a ser actualmente el más bajo en nuestra historia y ubica a Venezuela como uno de los países menos desiguales de la región.

La seguridad social ha sido uno de los logros más importantes desde el Gobierno que lideró el Presidente Hugo Chávez Frías y lo sigue siendo bajo el Gobierno del Presidente Nicolás Maduro. La cifra de pensionados ha tenido un crecimiento del 700% con respecto al número de pensionados previos a la revolución bolivariana.

Nuestro Presidente Chávez impulsó una Constitución que consagra la libertad sindical, el derecho a la negociación colectiva y a la huelga, y promulgó la más moderna legislación laboral, la cual prohíbe la tercerización, reduce la jornada de trabajo, otorga a los trabajadores un descanso semanal de al menos 2 días continuos, concede iguales derechos a los trabajadores domésticos, consolida un sistema de seguridad social que incluye hasta los trabajadores no dependientes, reconoce el trabajo de la mujer como ama de casa, amplía el reposo postnatal, entre muchos otros avances y reivindicaciones laborales.

En Venezuela se ha vivido la época de mayor amplitud, libertad y protección de los derechos y garantías laborales, e irónicamente han sido estos mismos años en lo que como nunca antes hemos sido falsamente acusados, basado en manipulaciones y mentiras destinadas a favorecer interesas privados, económicos y capitalistas que nunca han sido ni serán privilegiados por mi Gobierno.

Estos últimos años hemos estado sometidos, con mucha mas fuerza, a un brutal asedio de nuestra economía, se ha saboteado el acceso a los alimentos y a otros servicios para el pueblo, todo ello empujado por intereses imperialistas y corporativistas que quieren tomar control de Venezuela, el país con la reserva de petróleo más grande del mundo.

En otro orden, se hace un llamado a la inminente necesidad de transformación del modelo económico y político mundial, que lo que ha hecho es acabar con nuestra tierra y con nuestros pueblos y que terminará acabando con la humanidad.

El llamado también es a las organizaciones multilaterales y demás instituciones del mundo, que deben refundarse y democratizarse y verdaderamente considerar las necesidades de los pueblos. La OIT también está llamada a avanzar y a dejar de ser instrumento de la manipulación contra los pueblos que luchan por su liberación política y económica.

No vamos a sucumbir ni ante guerras, ni amenazas ni presiones, somos hijos de Bolívar y de Chávez y estamos decididos a seguir luchando por los trabajadores, por el pueblo venezolano y por la libertad, el respeto, la autodeterminación y la soberanía de nuestra patria.

Gracias Señor Presidente